Porque aparte de todo lo complicado que ya es el asunto, no todo se puede decir, y no porque las palabras no puedan intentarlo; sino porque sencillamente no pueden. Aún cuando los poetas hayan bajado del olimpo; aún cuando los miedos de comunicación se democratizaran y (pudiesemos todos aterrorizar a todos (aunque sea un poquito(como buenos chilenos))), aún cuando pudiésemos acompañar todo lo no dicho con jeroglifos y escrituras ideográficas varias, así como con fotos y toda la (desnuda) parafernalia imaginaria de la virtuosa virtualidad cibernáutica, con sus brisas y sus velocidades variables; aún así no se puede decir todo.
Creo que me entiendes, después de todo aquí estas. Tú y yo frente a la misma pantalla recitando las mismas letanías, como monjes en sánscrito. Respirando el mismo, viejo y viciado aire. En fin, el uno frente al otro. De pronto se me ocurre que podríamos inventar algún tipo de juego, algún intrincado pero fácil acertijo con el cual podamos encriptar la realidad en una forma completamente asible, incontrovertible. Para que todos aquellos que se sientan frente a una pantalla, que se buscan a sí mismos, frente a una página; encontraran lo que buscan, hallaran al que buscan; resolvieran el puzzle.
Pero bueno, para variar, no es neg-ocio sencillo. Por lo pronto, podríamos acordar que, no todo se puede decir y hay cosas que determinadamente pueden ser sólo circun v aladas, satelitadas, sugeridas; con la comisura del axón, con el rabillo de una coma. necesito nicotina... (las malditas Morellianas!),
Siguen las mismas voces y las mismas masticaciones eternas en relación a la vida, sus cototos y protuberancias. La H que falta antes de cada palabra, que acaso me persigue con su silencio…y dale con lo mismo!.
No. Me refiero a que cada vez que pienso en escribir a un imaginario personaje allá afuera en la noche de la incognicidad virtual sombras negras e indefinidas se abalanzan sobre mis letras sobre mi conciencia expresada en letras o sea mis letras que diferentes son a mi conciencia pero bueno ahora nos entendemos y ya que estamos en esto me gustaría recordarte que no me has visitado de pronto te vuelvo a encontrar sobre una hoja que va cayendo al suelo y recuerdo te había olvidado retomo lápiz y papel y te saludo con esta tinta indeleble que es el sonido de mi voz penetrando en tus oídos porque recuerdas mi voz cierto yo recuerdo como suena la tuya solo de vez en cuando sobretodo de noche y en el viento cuando se agolpa atropelladamente en la ventana pero estábamos hablando acerca de la incognicidad y las sombras ya que en ellas una silueta me saluda siempre desde lejos invitándome a que la dibuje no es acaso esto la literatura un dibujo la conciencia trazando con lápices de sonido que siguen resonando y que repites una y mil veces hasta que el sentido se pierde un día completamente de estos voy a levantarme más temprano un día voy a escribir uno de estos voy a verte caer recortando el cielo en tu final trazarte como dijo sabiamente monk en ese tema de la medianoche te acuerdas en fin todo ello parece a veces irremediable pero no te olvides que yo también en la noche y entre sombras y a la distancia espero me dibujes y me hagas hablar y me visites con sonidos y diversos colores a ver si fracturamos la monótona voz de maya que susurra esta realidad como infranqueable e inevitable a ver si eludimos los mismos viejos mecanismos de control de la verdad y mentimos un poco por diversión a ver si el mundo explota de una buena vez y comienza la vida mas allá del mundo mismo acá en tus letras en las mías pero bueno sabes que para ello debiéramos ostentar algún galón de oro de tierras extranjeras o estar en secreta connivencia con el duende que nos desliza sus venias sólo de vez en vez y de tanto en tan poco, más bien.
Estudiante de Magister de Filosofía PUCV.
Director Programa Ambulatorio Intensivos, Rehabilitación Drogas para Adolescentes "Infractores del Ley" en Privación de Libertad en Limache, Quinta Región.