-¡Estoy completamente desconcertada!- Exclamó la desconcentrada señora, que trataba de mantener a todos sus niños dentro del corral, preparar el almuerzo y pagar las deudas; mientras miraba los comerciales en la televisión.
Y en las calles, sus rejuvenecidas fotos crecían como légamo sobre las paredes y los postes, y a lo lejos, una banda tocaba una marcha fúnebre…
Todo ello mientras la fatídica danza de los dólares hacía llover petróleo sobre el desierto florido y extraía unos cuantos gramos de oro de un glaciar milenario.
Es cosa de muy pocos ser independiente: - es un privilegio de los fuertes. Y quien intenta serlo sin tener necesidad, aunque tenga todo el derecho a ello, demuestra que, probablemente, es no sólo fuerte, sino temerario hasta el exceso. Se introduce en un laberinto, multiplica por mil los peligros que ya la vida comporta en sí; de éstos no es el menor el que nadie vea con sus ojos cómo y en dónde él mismo se extravía, se aísla y es despedazado trozo a trozo por un Minotauro cualquiera de las cavernas de la conciencia. Suponiendo que ese hombre perezca, esto ocurre tan lejos de la comprensión de los hombres que éstos no lo sienten ni compadecen: - ¡y él no puede ya volver atrás!, ¡no puede retroceder ya tampoco a la compasión de los hombres! -
Nietzsche, F., Mas Allá del bien y del mal, Sección Segunda "El Espíritu libre". Edición de A. Sanchez Pascual, Alianza, Madrid, 2007, p.54
¿Con qué bella guirnalda debe un hombre adornar su orgullo? Es una pregunta por el valor. Entre tanto, tu esperas una canción romántica. Y sin embargo, el amor y su materia nos son siempre tan caros, ya que no es de ello que nuestro corazón está hecho. Y entre nuestras callosas manos sólo unas pocas pepitas refulgen; muy pequeñas y bellas. Pero no siempre son canción, y sin embargo, no hay cálculo que se ajuste a medir una melodía. La claridad de la noche que nos hemos regalado, nuestra pasión por la belleza y la vida y el amor, siempre será el tesoro que tú cuides. Pero siempre será nuestro. Es nuestra más bella canción.
Crédito para unos ciertos señores difuntos, ya descompuestos hace años por larvas y demases.
Debiésemos ensamblar un libro lleno de citas ocultas y vedadas, corrompidas a su vez por nuestros ojos y oídos acostumbrados al ruido.
Debiésemos, sin vergüenza alguna, recortar de las bibliotecas viejos libros y con sus retazos construir unos nuevos y vigorosos engendros, unos híbridos mutados y mutantes que se enfrenten a la fragilidad del tiempo.
Se puede llegar hasta la indigestión, debido a una mala dieta. Pero por otro lado se puede llegar a la indigestión debido a la mala digestión. Ejemplo de ello es una dieta rica en palabras propias, un hartazgo del rollo interno, una sobresaturación del veneno propio que le achacamos al otro; una especie de autoenvenenamiento. Esta especie de enfermedad autoinmune, aun cuando rara entre los hombres, no parece ser tan extraña entre las representantes del complementario género. Y no hay que olvidar que de muy poderosos venenos siempre se pueden extraer muy poderosas medicinas.
Pero la nocividad del efecto, dependerá de la variedad o exclusividad, de palabras que usualmente intentemos digerir, pero además del tipo de organismo con el cual contamos. Si es de tipo ovino o vacuno, por ejemplo, la carne - especialmente la roja; generará estragos en el tránsito del tracto. Lo cual, será causa probable de múltiples malestares y aletargamientos en todo ámbito. Esto aparece inversamente proporcional en el caso de estómagos acostumbrados a digerir hasta cartílago si es necesario, siendo más probable que los vegetales no sólo no generen indigestión, sino que más bien proporcionen sólo una breve distracción, lo cual probablemente precipite una nueva e ingente porción extra de lo mismo, o en su defecto, una vuelta indefectible a los sabores irremplazables del cadáver.
En general debiésemos estar al tanto de las características de la propia digestión, y evitar el abotagamiento con aquellas palabras y sustancias que no nos es saludable intentar digerir. En general, el hartazgo es evitable toda vez que se deja de consumir las cantidades que provocaron el malestar, intentando mesura en ello o cuando el cuadro es grave o crónico, evitando a todo evento el mentado estímulo.
Me gustaría que leyeras este mi primer trabajo, que con mucho esfuerzo y dedicación engendré. Sé que te va a gustar, porque tienes "orejas pequeñas". Te advierto que el crédito de todo, debe atribuirse a quién en realidad es autor de la mayor parte del texto. Te dejo su foto, probablemente tú también le conoces. No dejo un extracto, porque te sería mejor leerlo completo. Ah! y se me olvidaba, no te confundas, no es literatura.
Cada cierto tiempo, distintos tipos de objetos, adquieren una cierta animación y se mueven.
El caso que te quiero presentar, fue rescatado de un episodio violento y subrepticio, acaecido en años idos a compañeros de trabajo, en la sección de menores de una cárcel; en la cual trabajabamos. Y sobre este caso, aplicamos una plantilla; una que le lleva theoría Sociológico-Interaccional (concretamente Bourdieu y Goffman).
Es una suerte de ayuda-memoria para cuando surgen problemas diplomáticos, y nos preguntamos su porqué, sin encontrar respuesta. Finalmente documento de trabajo para el equipo.
Usar disfraz. No sería gran innovación. Sería cómo una democracia latinoamericana basada en una constitución redactada sediciosamente. Un gran disfraz republicano. Entonces sí, pasar a la clandestinidad. Sumergirse en la sombra, vestirse de gris y mimetizarse. Confundirse con las paredes, transformarse en aviso publicitario. Diluirse en el paisaje hasta fundirse con las nubes, o con la maleza. Y jugar en su juego. Sí, disparar y volver a desaparecer. Ser sombra y cubrir con misterio el color y las intenciones, que resplandecen; así es como se perdió vietnam o no? Finalmente una poda antes del solsticio augura frutos frescos, a la hora de la primavera.
UN viaje a través del portal. Caucus Race, una y otra vez.
Si todo lo debiesemos volver a repetir interminablemente ¿no deberíamos vernos bien mientras corremos?.
Para ello, pudiese ser necesario un poco de disciplina (al menos algunos procedimientos).
I n c l u s o , p a r a s ó l o d e s c r i b i r l o .
Leer: "Del viaje de Alicia a las maravillas" http://images.google.cl/imgres?imgurl=http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/6/69/Alice_par_John_Tenniel_25.png&imgrefurl=http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Alice_par_John_Tenniel_25.png&usg=__FZEFtqv8V1ItZoOEZzfnZIXeX_c=&h=487&w=640&sz=22&hl=es&start=13&sig2=ZBH_7b5_38Zu6M3Z8Wb-5g&tbnid=Ys68eFJruh43wM:&tbnh=104&tbnw=137&prev=/images%3Fq%3Dalice%26gbv%3D2%26hl%3Des%26sa%3DG&ei=mdcnSr2YGOWGmQfH7_CcDA
Este texto fue construido a través de años de trabajo directo y muchas horas de conversación al interior de espacios carcelarios para adolescentes de Valparaíso. Te dejo el documento completo.
¿Es la obediencia, en un régimen republicano, el valor central?
¿Es posible un régimen republicano, sin des-obediencia?
En la educación entonces, pilar de cualquier régimen político. ¿Debiese ser la obediencia el metal del cual sea acuñada la moneda ciudadano?
Cuando se tienta el control de todos los discursos. Cuando se asfixia toda creatividad. Cuando se castiga toda voz opuesta. Cuando se prohíbe toda diferencia con discursos desde la media. Cuando se ataja y se socava la asertividad y la divergencia. Lo que se desea y se obtiene es un totalitarismo; un absolutismo disfrazado de democracia; homogenización vestida de arcoíris.
¿Cómo India se sacudió el yugo inglés...? ¿Cómo Chile dejó de ser colonia? A todo esto, dejamos de serlo?
Bienvenida conciudadanos la des-obediencia, la nuestra desobediencia de cada día.
En el nombre del Yeti, del Sascuash y del Monstruo del lago Ness.
Para ser completamente honesto, debo confersar que soy un mentiroso. Pero de ello, sin embargo, soy inocente. La culpa la tiene Otro. Las palabras conspiran ellas entre sí, para confudir lo dicho con lo que digo. Esas perras negras que me siguen a todas partes, que a veces se sientan o ruedan, que me mueven la cola y que, aún cuando a veces las reprenda, fieles, cuando no me doy cuenta, vuelven haciéndose las muertas. En muchas ocasiones me miran desde la distancia, con paciencia. Y aprovechándose de cualquier descuido, a tropel, se agolpan en mi puerta. Un día de estos, tendré que alethearsin palabras.
O, un día de estos te diré alguna verdad, por supuesto, con negras perras.
Convertirse en un artista de la fuga... un maestro del escapismo...Encontrar (e inventar) miles de nuevas e interesantes formas de evadir, el poder.Una bicicleta, una cachaña, una finta, pero más aún, un espejo: en el cual el poder se refleje y se contemple. Que de acuerdo a conveniencia sea concavo o convexo. Una pantalla en blanco, en la cual se pueda proyectar; una hoja sin texto en la cual se inscriba y se contenga, un papel para quemar,una lámina roscharch. Convertirse en maraña de trucos, una interminable acumulación de velos bajo los cuales, no se halle nada, excepto más velos. Convertirse en una perfecta cebolla. Multiplicarse en mañas hasta transformarse en una gitana vieja, en el maestro Houdini... evadirse para, en pequeñas victorias, vencer. Verse como un gran borrón, como palabra escrita que la mirada astigmática del panóptico intenta enfocar, simpre silueta, siempre figura. La mano vacía y el espiral del viejo Ueshiba, para hacer tropezar. Sólo para reír, como ejercicio de vitalidad y libertad. Como el maligno aire del espíritu libre que burlón y ligero se rebela al revelarse vacío, vaciado.
Una carrera sobre la nieve a la luz de luna en el claro de aquel bosque, con el aliento de los pensamientos-lobo pisándote la cola. Toda una jauría de ellos, jadeantes y hambrientos.
Ya sabes como termina la historia porque, en el fondo, tú eres esos lobos devorándote.
Las largas y elásticas patas sobre la nieve sólo sirven para hacer que los viejos cazadores se cansen y babeen, para prolongar por sólo un instante más el baile, pero no para escapar. El llamado de lo salvaje sin embargo es más fuerte, y la sangre no ceja en su palpitar.
Perseguir tu presa a toda velocidad a la luz de la luna, en el claro de ese bosque, a punto de atraparla. Compitiendo para adelantar una pata, por avanzar una dentellada. Sabiendo que, en el fondo, eres tú ese pequeño conejo blanco al que cazas con tanta ferocidad. La luz blanca deslizándose por tu lomo, cargado de estática, erizado por el ansia de atrapar la presa; desplazándose como un barco sobre la espuma de la tormenta, sólo la caza llena tu cabeza, sólo el sabor de su olor llena tu hocico, que babea.
Un hombre al pie de página... Una inasible vida que se desliza bajo un texto que la domina, la determina y significa - que lo intenta. Una página al pie de un hombre... Borrador que, incompleto, colorea los bordes de una silueta; intentando que éste no salga de sus bordes. Un punto en el que apoyarse... un parrafo sin terminar, Una página al pie de página... Cópula que engendra extraños y pequeños objetos á-cefalos. Trasvasijes interminables de letra en letra en letraen letra enletra... ladrillo sobre ladrillo como un Zigurat, tentativa de puerta hacia el infinito. Un hombre al pie del hombre... El capital-itsmo, los común-himnos, los leviatanes, etc...
Las paginas en los pies de un hombre, mantienen sus pies calientes. http://image08.webshots.com/8/2/64/84/132026484wXJrkh_fs.jpg
En ocasiones la musa susurra en tenues suspiros, sus secretos designios en sutiles sonidos.
Inspiración... Exhalación...
Vida... Muerte...
Danza de lo interminable, de lo imperecedero que permanentemente cesa.
Ronda de lo que retorna.
Es que acaso ensuciamos el agua para hacerla parecer profunda...?
No, porque tú y yo hemos pasado por ello y no es nuestro destino...
Verlo todo arder... Sí, en una pira ver como arde y se purifica... Como un fanático, estas imagenes, aún cuando maligna-mente saludables, han rozado mis horas de insomnio.Danzando las lenguas crepitantes, han tomado posesión de los dinteles y capiteles, de radieres y años de trabajo. Una venganza contra el apego, a la vez que gigantesco espejo hecho de destrucción pura, de energía desatada.Como un viejo emperador tocado en su orgullo.¿Será la hora de cortarse el pelo?.¿Renunciar a la vanidad? ¿O sumergirse completamente en ella, hasta convertirla en virtud, hasta recuperar la salud? Quiza debiesemos preguntarle a los musculos de la espalda.
Estudiante de Magister de Filosofía PUCV.
Director Programa Ambulatorio Intensivos, Rehabilitación Drogas para Adolescentes "Infractores del Ley" en Privación de Libertad en Limache, Quinta Región.